silencios
Existen muchas clases de silencios.
El silencio indiferente.
El silencio del emboscado.
El silencio del miedo.
El silencio de la oración.
El silencio que confabula.
El silencio del que sabe que sus palabras no van a ser oidas.
El silencio del que contempla la injusticia y la deja pasar.
El silencio de quien ataca por la espalda.
El silencio de la mirada de quien conoce lo que te espera.
El silencio de la esperanza y la desesperanza.
El silencio del que sabe más que tu.
El silencio del rencor que se fermenta en rincones oscuros del alma.
El silencio de la vergüenza de la víctima.
El silencio que espera venganza.
El silencio de la angustia.
El silencio que espera pasar desapercibido.
El silencio de un atardecer anaranjado en la bajamar quieta.
El silencio de la incertidumbre.
El silencio del que sabe lo que quiere.
El silencio del que espera al inevitable verdugo.
El silencio lleno de palabras, palabras como ladrillos, palabras como piedras de silleria. Palabras que construyen muros, muros que ocultan lo que se quiere silenciar.
Palabras que construyen monumentos, monumentos que descansan sobre criptas, criptas que encierran la palabra que se quiere silenciar.
Todos los silencios conviven en el Pais Vasco.
En Euskadi reina el silencio.
Las ideas amordazadas por las consignas.
La bondad ahogada por el mito.
El Pais Vasco es un paramo desolado de silencio que sueña con ser un prado de verdor inmaculado donde pastan felices las vacas sagradas.
En Euskadi conviene el silencio. Conviene mantenerse en silencio.
Calla mi niño calla, que la bestia ronda.
En el Pais Vaco explota el silencio con un trueno sordo y oscuro que rebota en las entrañas y en los genitales.
En Euskadi el silencio derrite las mielinas que rezuman su diarrea de razonamientos initeligibles.
En el Pais Vasco el silencio esta lleno de los ecos de las palabras que rebotan en las paredes de los craneos, pequeños diablos hirientes incansables. Los craneos de la buena gente que sólo quiere reproducirse, comer y trabajar. La buena gente que te dice que es mejor callar.